jueves, 7 de octubre de 2010

Am♥r en tres Ángulos ~


Cuando dio vuelta a la esquina y se topo con el puesto de libros supo que ese era el libro para ella. En el hotel, escribió una dedicatoria y la guardó en la valija ya repleta. Lo que no sabía era que ella iba a leer sus letras cada noche antes de dormirse.


El día en que la niebla ocultó a la ciudad, él cortó una florcita blanca y se la regaló. Ella se recostó sobre su espalda y ocultó bajo la densa bruma cuánto necesitaba un abrazo suyo. Él respondió quieto y en silencio.


Una vez que la pequeña flor estuvo seca, decidió guardarla dentro del libro junto a la dedicatoria junto a la cabecera de su cama. Sabía que ellos dos no sabían que atravezaban sus días cada día.


~

Antonela acercó el banquito a la cómoda y abrió el primer cajón. Seguramente mamá guardaba los lápices de labios en el cajón al cual ella no llegaba. Lo primero que tomó fue un libro de hojas amarillentas. Del libro cayó una flor seca.



Foto+texto: CeLeS!
En el espejo: Luii, Anto, Oso

7 comentarios:

vientos de cambio dijo...

uuuuuuuffffffffffffffffffffffffffff
si si
asi es la cosa

firma celes
justo para leer un viernes a la mañana

gracias

El sereno de los faros dijo...

lindo relato celes.

besos,

vico gonz dijo...

Conmovedor y ...removedor también!!!
Besossssssssmilesssssssssssss.

Nico / Nicolino dijo...

aguante los memories y tus fotos.
love you.

silvia zappia dijo...

el círculo debe cerrarse...


besos*

Rita Gabriela Acosta dijo...

Muy linda entrada.♥
un besito gordi.:)

Ana dijo...

Preciosa manera de saltar de un tiempo a otro para constatar que todo sucede en un instante.

Paseando paseando me he encontrado aquí,ahora,sin saber cómo.

Un saludo.